Hay una gran cantidad de efectos secundarios asociados a los tratamientos para combatir el cáncer. Cada paciente y la terapia recibida son únicos e individuales, por lo que no significa que vas a tener todos o algunos de los efectos secundarios. No obstante, todavía podrías estar en riesgo nutricional. Todo los tipos de terapia: como la cirugía, la quimioterapia, la inmunoterapia y/o la radiación, podrían afectar tu estado nutricional, ya que interfieren con la capacidad que tiene el cuerpo para digerir, absorber y metabolizar adecuadamente los nutrientes de los alimentos. Cuando tu cuerpo no obtiene los suficientes nutrientes esenciales y las calorías necesarias, es muy probable que aparezcan los primeros signos de desnutrición.
Por lo tanto, es muy importante reconocer los primeros signos de desnutrición en una etapa temprana para contrarrestar el agotamiento de las reservas corporales, tomando las medidas apropiadas. Entonces, ¿Cómo puedes evaluar tu estado nutricional?
El médico que te está tratando puede evaluar tu estado nutricional y detectar si estás teniendo una ingesta inadecuada, sobre la base de diferentes pruebas y de un historial médico completo.
Con la medición del IMC el profesional de la salud evalúa si nuestro peso corporal es el apropiado. Proporciona rápidamente información sobre la relación entre la altura y el peso. Esta medición servirá como base para evaluar si la ingesta alimentaria satisface las necesidades nutricionales.
